¡Ahoga a tu oponente!

El título de este artículo podrá sonar un poco raro a muchos lectores. En general, tener la posibilidad de ahogar a tu oponente significa que eres tú quien está en control de la partida. Y de ser así, ¿por qué te conformarías con unas tablas? Además, como les advertí a los jugadores menos experimentados a comienzos de este año, tener una gran ventaja material mientras tu oponente sólo tiene el rey, acarrea el gran peligro de que lo ahogues. Entonces, ¿de qué estamos hablando? Déjenme que les explique.

En ajedrez, al hablar de ahogado, podemos referirnos a dos cosas completamente distintas. La primera es el ahogado real, en el que un jugador se queda sin movimientos legales posibles cuando es tu turno y la partida finaliza en tablas. Obviamente, es algo muy malo el tener una posición ganadora y ahogar (realmente) a tu oponente. Esto ocurre en muchas partidas disputadas por jugadores menos experimentados, como la que vemos a continuación:

Aún colgándose la dama en lugar de la desafortunada 56...f5??, dejaría a las negras con una posición completamente ganada. En este tipo de posiciones, el ahogado es ciertamente lo peor que puede pasarte. Esto es, precisamente, sobre lo que hablaba en el artículo anteriormente mencionado.  

Sin embargo, la palabra "ahogado" puede también tener otro significado cuando sale de la boca de jugadores fuertes. Cuando un gran maestro dice con orgullo "lo ahogué por completo", se puede percibir, incluso, algo de fanfarroneo. En este contexto, el ahogado significa que el oponente casi no puede mover sus piezas y que, en la práctica, la situación sobre el tablero es casi de zugzwang.

A continuación, veremos lo que GM Garry Kasparov escribió en su libro "Kasparov sobre Kasparov - Parte I", sobre su partida frente a GM Svetozar Gligoric: "Pero luego, mi oponente se equivocó y, al final, conseguí ahogarle las piezas". Veremos ahora la partida, en la que Kasparov vuelve a mencionar la idea del ahogado en los comentarios de la 33ª jugada:

Por lo tanto, y siguiente con las partidas de Kasparov como ejemplo, el siguiente es el tipo de ahogado que debemos evitar:

Y, a continuación, una situación muy deseable en la que las piezas de tu oponente están "estancadas" y prácticamente sin movimientos posibles:

Recordaremos a la recientemente finalizada Copa del Mundo de la FIDE 2021 por diversas cosas. Lo que primero se nos viene a la cabeza es el triunfo del GM Jan-Krzysztof Duda o el número de participantes que tuvieron que retirarse del evento (¡incluso en el medio de una partida!) debido a COVID-19. Sin embargo, en lo personal recordaré el torneo por dos obras maestras de GM Magnus Carlsen. Cada una de ellas representa exactamente a lo que Kelly Clarkson se refiere cuando canta "Algunas personas esperan toda la vida para un momento con este".

¡El campeón del mundo produjo estas dos joyas en días consecutivos! Y es particularmente impactante ya que su oponente, GM Vladimir Fedoseev, es un jugador extremadamente fuerte e ingenioso. Aún así, las piezas del gran maestro ruso al final de ambas partidas me recordó a una persona saliendo de un bar tarde por la noche: necesita ir a su casa pero sus piernas no se mueven. Desafortunadamente, como no se puede tomar ni taxi ni Uber en el tablero de ajedrez, las piezas de Fedoseev se quedaron sentadas en el bar mientras su reino ardía en llamas.

Presten atención a las jugadas 16ª y 18ª de Carlsen: sacrificó un peón y luego una calidad en la misma casilla, f4. ¡Me gustó mucho! Hace más o menos dos años, escribí el artículo "La obra maestra inacabada de Magnus Carlsen", que hablaba sobre su sacrificio en la misma casilla, f4. ¡Me pone contento ver que el campeón del mundo haya finalmente completado su obra maestra! 

La segunda partida del match fue igual de impresionante:

Es muy poco común ver este tipo de partidas. No obstante, si aceptas el desafío, el primer paso sería establecer el hábito de preguntarte: "¿qué quiere hacer mi oponente?", antes de realizar tu jugada. 

Para los principiantes, hacerse esta pregunta sería una buena forma de descubrir amenazas de mate ocultas del oponente o evitar el colgarse las piezas propias. Para aquellos jugadores más experimentados, esta pregunta podrá ayudarles a realizar jugadas tales como el 47. Ag4! de Carlsen, previniendo la activación de la torre negra a través de la casilla h5. En muchos casos, ¡son precisamente este tipo de jugadas sutiles las que representan los componentes básicos de las obras maestras!

Para resumir: evita los "malos" ahogados y, en cambio, ahoga a las piezas de tu oponente, ¡tal como lo hizo Carlsen!