Cómo jugar contra el Peón de Dama Aislado
Las posiciones con peón de dama aislado son muy importantes, pues se puede llegar a ellas a través de muchas aperturas diferentes. Crean un tipo de centro muy característico, en el que el bando que posee la teórica debilidad del peón central aislado trata de aprovechar la ventaja dinámica que suele adquirir en estas posiciones. Ventaja estática contra ventaja dinámica suele ser el escenario en el que transcurre la batalla, pero por si no sabes muy bien de qué va todo esto, te lo explico en detalle
Ventaja estática contra ventaja dinámica
La ventaja estática es la que suele estar determinada por el material o la estructura de peones principalmente. Se consideran ventajas a largo plazo, aprovechables especialmente en el final. Si tenemos una pieza de más está claro que poseemos una ventaja a largo plazo y, salvo que cometamos un grave error deberíamos de ser capaces de imponer nuestra ventaja.
Pero una ventaja de este tipo (una pieza de más) no es muy habitual en las partidas de un nivel medio - alto. Normalmente el tema de la ventaja estática se suele aplicar a la estructura de peones. Si nuestro rival tiene peones doblados, aislados, retrasados, colgantes, etc, mientras que nosotros lucimos un esqueleto de peones envidiable, podemos decir que tenemos ventaja estática.
La estructura de peones es un de los elementos más importantes en cuanto a la ventaja en ajedrez.
Pero tener ventaja estática no nos garantiza la victoria. Ni siquiera significa que estemos mejor, puesto que nuestro rival podría tener la ventaja dinámica.
La ventaja dinámica es la que tiene que ver con los factores no estáticos de la posición, como son el espacio, desarrollo, coordinación, actividad... Aquí entrarán diferentes protagonistas en juego, pero la clave será la facilidad que pueda obtenerse para ganar y mantener la iniciativa.
Si un bando tiene la ventaja dinámica y su rival no tiene a cambio la ventaja estática, se puede establecer que sencillamente está mejor. Y, por supuesto, lo contrario: si un jugador tiene la ventaja estática sin que su rival pueda crear ningún problema dinámico, pues sencillamente estará mejor.
Pero es cierto que en muchas posiciones la ventaja estática y la ventaja dinámica se enfrentan en posiciones donde existe cierto equilibrio. Peor cada bando debe saber muy bien qué hacer.
El plan de cada bando
Una vez más las cuestiones estratégicas del ajedrez, como las de la vida, se pueden resolver mediante cierta dosis de sentido común. Planteemos una posición muy conocida y particularmente importante del peón de dama aislado (PDA).
Si quieres que te diga quién está mejor, tenemos un problema. creo que no hay nadie sobre este planeta capaz de responder a esa cuestión. Ni siquiera alguien llamado Magnus...
Es una posición conocida de PDA. Como te comentaré más adelante se puede llegar a ella por muchos caminos. Pero se considera que existe cierto equilibrio entre la ventaja estática de las negras, que poseen una mejor estructura de peones, ya que el peón central aislado se puede considerar una debilidad y la ventaja dinámica de las blancas, que poseen la ventaja de espacio que le otorga su peón en el centro y la ventaja de un juego de piezas más activo.
Como la ventaja de una mejor estructura se puede aprovechar especialmente en los finales... ¡ya tenemos el plan del bando que juega contra el PDA! Simplificar, sí señor. Tan sencillo como eso. Cada cambio de piezas será un pequeño éxito estratégico para las negras (en el caso de la posición del diagrama anterior.) Habitualmente, cuánto más cerca esté el final mayor será la ventaja del que juega contra el peón aislado.
Recuerda: la posesión de un peón aislado puede condicionar el rumbo de la partida...
Y supongo que ya tienes claro cuál debe ser el plan del jugador que posee el peón aislado. Y no me digas que evitar las simplificaciones, que eso más que ser un plan propio es una cuestión profiláctica (evitar las ideas del rival.) El bando del PDA deberá buscar la iniciativa, aprovechar su ventaja dinámica para crear problemas, especialmente, si es posible, al rey enemigo.
Todos los caminos conducen a Roma... o al PDA
Si insisto en la importancia de estas posiciones no es por otra razón que porque se dan con mucha frecuencia. De hecho, te muestro a continuación diferentes caminos por los que podríamos llegar a la posición del diagrama anterior.
Ataque Panov de la Defensa Caro-Kann
Apertura Inglesa Simétrica
Gambito de Dama Variante Tarrash
Y por supuesto, existen otros caminos para llegar a esta misma posición... y a posiciones muy parecidas ya ni te cuento...
Así que son fundamentales. debemos entenderlas, porque cualquier día podemos estar sentados a cualquier lado del tablero. Es cierto que cuando un jugador conoce bien este tipo de posiciones suele preferir uno de los bandos en concreto, dependiendo de su estilo y características. Un jugador de ataque preferirá jugar con el PDA, mientras que un jugador sólido suele preferir jugar contra el PDA.
¿Qué tipo de jugadores te consideras tú? ¿De ataque o defensivo?
Juguemos contra el PDA
Seguramente en un futuro artículo me encargaré del apasionante tema de cómo jugar con el PDA, pero vamos a comenzar con la otra perspectiva. Hay dos grandes razones por las que el plan principal del bando que juega contra el PDA es la simplificación de material:
- En los finales se pueden aprovechar mejor las debilidades estructurales.
- El plan de las blancas es aprovechar su ventaja dinámica, es decir, crear iniciativa y posibilidades de ataque. Ese ataque no será tan peligroso si conseguimos cambiar piezas.
Otra idea importante que debemos tener en cuenta es que el peón aislado podría ser avanzado, lo que muchas veces favorece al que realiza el avance, ya que suele tener una posición más activa de piezas gracias su ventaja de espacio y, por tanto, si se abre la posición tras el avance el juego puede resultarle favorecedor. Por esto muchas veces se recurre al bloqueo del PDA, para que no pueda avanzar abriendo la posición.
Si el jugador que defiende no actúa correctamente, el peón pasado podrá seguir avanzando...
Pero, ya que insistimos tanto en que los cambios y simplificaciones son parte esencial del juego contra el PDA, es bueno echar un vistazo a cuáles de ellos nos pueden resultar más favorecedores.
Final de peones
Solo en algunos casos se puede ganar el final de peones con la estructura típica del PDA. Todo dependerá de si el rey del bando fuerte puede colarse por las casillas que hay junto al peón aislado. Lo entenderemos mejor con los siguientes ejemplos.
En el primero de ellos el blanco consigue ganar por no realizar a tiempo el avance a5, y permitir que sea el blanco el que lo realice.
Las negras tuvieron más cuidado en el siguiente ejemplo, en donde se defendieron con éxito.
Final de piezas menores
El final de alfiles de distinto color ni lo vamos a tratar, puesto que está bastante claro que será tablas. El de caballos también es absolutamente tablífero, puesto que el rey del bando fuerte normalmente no podrá situarse en la casilla de bloqueo del peón aislado sin exponerse a ser expulsado mediante jaque del caballo enemigo.
Sin embargo, el final de alfiles del mismo color puede ser muy interesante. Veamos dos temas muy instructivos en este tipo de finales.
En el primero de los finales que te muestro las blancas necesitan un plan que podemos dividir en varias fases:
- Evitar que el alfil enemigo pueda defender el peón desde c6, llevando un peón a b5.
- Atacar el peón de las negras desde la diagonal a2-g8.
- Romper en e4 en el momento oportuno, ganando el peón de d5.
- Conseguir progresar con su rey en el final de peones resultante.
Otra maniobra muy instructiva la aprendemos en el siguiente final, en el que es necesario forzar el zugzwang para progresar con nuestro rey.
También es muy importante el final de caballo contra alfil malo (si el bando débil lleva el alfil malo). Veamos un ejemplo.
Normalmente la manera de progresar más habitual, a partir de posiciones similares a la del siguiente ejemplo, consiste en:
- Sitúar el rey en la casilla de bloqueo del peón aislado.
- Colocar nuestro caballo atacando el peón débil.
- Progresar con nuestro peones del ala de rey.
Final de torres
Las torres son piezas especialmente para presionar el peón aislado, por lo que suele ser bueno mantener alguna si jugamos contra el PDA.
En el final puro de torres entran en juego varios factores, pero como ya podemos imaginar, el control de la columna abierta jugará un papel importante. En el siguiente ejemplo las blancas fuerzan un cambio de caballos para entrar en el final con pareja de torres por bando, pero con la columna abierta dominada.
Menos claro puede parecernos el siguiente ejemplo, donde las negras llegan a tiempo a parar las amenazas en la séptima fila, pero acabarán con una torre enemiga activa en la octava.
Casi final (más bien medio juego) con torres y damas
Se trata de posiciones de medio juego, muy próximas al final, que debemos aprender para jugar correctamente contra el peón aislado. Muchas veces se llega a estas posiciones donde solo quedan las piezas mayores. Veamos algunas sutilezas a través de estos dos ejemplos.
El primero de ellos es muy conocido, puesto que Korchnoi, incomprensiblemente, permitió, e incluso provocó, bastantes cambios de piezas,a pesar de que tenía el PDA.
El avance f4 para impedir e5 ha sido determinante. Se debilita el enroque, como hemos visto. Con el peón de las blancas en g3, la segunda fila ha quedado muy débil y el rey blanco accesible para las piezas negras. ¿Qué hubiera ocurrido si el peón en vez de en g3 estuviera en f3? El GM Dreev nos responde.
Espero que este artículo te ayude a la comprensión de estas importantes posiciones, que pronto miraremos desde la otra perspectiva en un futuro artículo sobre cómo jugar con el PDA. Hasta entonces te invito a que compartas tus dudas, sugerencias ¡y partidas! en un comentario.