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Cómo jugar el ataque de la rana hirviendo
Ninguna rana ha sufrido durante la redacción de este artículo.

Cómo jugar el ataque de la rana hirviendo

Gserper
| 96 | Estrategia

Permitidme que comience con un descargo de responsabilidad. Aunque el título suene siniestro, puedo aseguraros que ninguna rana ni ningún otro animal sufrirá daños a consecuencia de este artículo. ¡Solo es una metáfora!

Así lo explica Daniel Quinn en su libro "The Story Of B":

Si arrojas una rana en una olla con agua hirviendo, por supuesto intentará salir frenéticamente. Pero si la colocas con cuidado en una olla de agua tibia y enciendes un fuego bajo, la rana flotará en ella placenteramente. A medida que el agua se vaya calentando, la rana se sumirá en un plácido estupor, igual que hacemos nosotros en un baño de agua caliente, y al cabo de poco tiempo, con una sonrisa, se dejará hervir hasta morir sin oponer resistencia.

Quiero mostraros una partida jugada por dos famosos GM de élite en la que las blancas ganaron en solo 16 jugadas.

Las negras no quebraron ninguna norma de apertura, estaban totalmente desarrolladas y enrocadas. Lo que es más, no cometieron ningún error grave y sin embargo tuvieron que abandonar después de que las blancas hicieran su 16º movimiento.

¿Cómo es eso posible? 

Comencemos con la apertura. Los primeros movimientos fueron 1.d4 d5 2.e3.

Esta línea es conocida como "la apertura de los peones de dama" y casi siempre lleva a un juego lento posicional. Pero hay una variante con el apropiado nombre de "El Muro de Piedra" en la que las blancas literalmente crean un muro en el centro usando sus peones:

Para un jugador inexperto, esta configuración puede parecer la defensa perfecta.

A stone wall

Efectivamente, parece que las blancas crean un muro en el centro para evitar cualquier ataque posible. En realidad, el objetivo de las blancas es muy ambicioso. Preparan un asalto directo al flanco de rey en el que su Ad3 y especialmente el Ce5, apoyados por los peones d4 y f4, serán muy peligrosos.

Mira cómo puede continuar la partida si las negras no tienen cuidado:

Así que puedes ver lo engañosa que es esta apertura. Parece una configuración lenta y tranquila y de repente, como de la nada, ¡le dan mate al rey de las negras! En la mayoría de las aperturas muy agresivas, como la Defensa Siciliana, tu oponente es muy consciente de tus intenciones de ataque y juega de manera acorde..

En la apertura del Muro de Piedra, las negras a menudo no ven el peligro hasta que es demasiado tarde. Así que las negras son la rana, por así decirlo, ¡y tu objetivo es el de ir aumentando la temperatura del agua poco a poco hasta que hiervan!

Esta estrategia fue muy popular contra los primeros programas de ordenador. No podían ver el peligro debido al llamado "efecto horizonte", ¡así que los ajedrecistas humanos habilidosos los hervían con facilidad!

El gran maestro Rochard Reti fue uno de los mayores expertos de aperturas de su tiempo e incluso hay una apertura que lleva su nombre. Cuando uno de los mejores jugadores de la época, el GM Akiba Rubinstein, comenzó a construir el muro, ¡Reti vio el peligro de inmediato!

Para frenar el ataque que le venía, las negras decidieron sacarle el aguijón a la configuración de las blancas: ¡el alfil en d3! Adivina cómo respondió Rubinstein a la estratagema de las negras.

Sí, en lugar de una captura muy natural con la dama en d1, Rubinstein prefirió quedarse con los temidos peones doblados. ¿Por qué hizo eso? Pues, para empezar, su "muro!" en el centro se volvió aún más masivo y, lo que es más importante, reparó el agujero en e4, ¡de modo que el caballo de las negras en f6 no podía saltar ahí nunca!
La siguiente pregunta también debería ser fácil para ti. ¿Cómo deberían proceder las blancas?

Con cada movimiento, las blancas van subiendo la temperatura de modo que las negras "se van sumiendo en un plácido estupor" y capturan el caballo en e5 debido a la desagradable amenaza de Ah4! Por supuesto, abrir la columna de "f" contra su propio rey no le ayudará a defender.

¡Encuentra el toque final de Rubinstein!

¡Es increíble cómo las blancas llevan poco a poco sus piezas a atacar el rey de las negras y sin embargo su rival no puede hacer nada! El agua se va calentando más y más con cada jugada hasta que el rey muere achicharrado.

Esta no es la línea de apertura más sofisticada, así que no esperes ver a Magnus Carlsen jugarla cualquier día de estos. Sin embargo, puede ser un arma muy peligrosa para los ajedrecistas aficionados. Así que ya sabes: hierve lentamente los reyes de tus oponentes.

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