Las excepciones del peón de torre en los finales
Del mismo modo que es importante conocer las reglas y posiciones teóricas de los finales de partida, también es fundamental conocer las excepciones a ellas. Y al simpático peón de torre le gusta tomar protagonismo cuando de excepciones en el final se trata. Así que te muestro a continuación algunos finales en los que el peón de torre es la excepción que confirma la regla (nunca he entendido muy bien esta frase, pero suena bien).
Por supuesto aprovecharé para enseñarte los finales similares en donde la regla se cumple (cuando el peón no es de torre) por lo que espero que este artículo te sirva para aprender algunos de los finales más importantes que existen en ajedrez.
Rey y peón contra rey
Este final contiene muchas posiciones de tablas. Con juego correcto, si el bando defensor se encuentra delante del peón enemigo, impidiendo al rey del bando fuerte colocarse delante de su propio peón, el final es tablas. Paradójicamente, aunque el plan debe ser avanzar el peón para promocionarlo, este avance debe posponerse y el rey debe avanzar abriendo paso a su peón.
En el siguiente final el bando fuerte no puede ganar, a pesar de que el rey ha llegado a situarse delante de su peón, porque el rey enemigo ha ganado la oposición (está justo enfrente con una casilla de separación).
En cambio, si el rey blanco puede forzar la victoria si ha conseguido avanzar un poco más, hasta una de las denominadas casillas críticas (las 3 que hay delante del peón no, las 3 siguientes: con el peón en d3 serían c5, d5 y e5. Cuando el peón cruza la mitad del tablero las casillas críticas son las que hay inmediatamente delante. Por ejemplo, con el peón en d5 serían c6, d6 y e6. Si no conoces estos conceptos te recomiendo que veas el vídeo que te ofrezco más adelante.) Si en el ejemplo jugaran las negras, perderían la oposición y el rey blanco accedería a las casillas críticas, ganando fácilmente.
Y ahora viene la excepción: con el peón de torre todo lo explicado no sirve El final es sencillamente tablas siempre que el rey defensor llegue a la casilla de coronación del peón. Ni casillas críticas, ni oposición, ni que Magnus Carlsen conduzca las piezas blancas. Da igual.
Pero todo esto (y mucho más) te quedará muy claro si echas un vistazo al vídeo de la última clase de los miércoles. Porque... sabes que cada miércoles tenemos una clase de ajedrez en directo en chesstv, ¿no? Aquí tienes el vídeo de la clase dedicada a finales de peones.
Rey y dama contra peón séptima
Éste es un final que se produce con mucha frecuencia en la práctica, sobre todo a partir de posiciones en las que se lleva a cabo una carrera de peones pasados: uno consigue coronar y el peón enemigo queda en la séptima fila, a un paso de convertirse en dama. Si el rey del bando fuerte tiene su rey cerca del peón enemigo no suele haber problema técnico para ganar.
Pero hay otros casos en los que el rey está lejos y para ganar debe acercarse. Y además debe impedir que el peón enemigo corone. ¡Difícil, pero no imposible!
Veamos un ejemplo.
Y ahora viene la excepción. Con el peón de torre el bando débil cuenta con importante recurso.
Pero debes aprender que hay otra excepción en este final. No sería justo dejar de comentar que también son tablas en caso de peón de alfil (por supuesto siempre hablamos en el supuesto de que el rey del bando fuerte esté lejos). Aunque ahora no es el peón de torre el protagonista, merece la pena que lo aprendas.
Peón de torre y alfil contra rey
¿Un peón y un alfil contra rey? ¿Qué excepción puede existir ahí? Debería estar ganado en todos los casos: pieza y peón contra rey... Sin embargo nuestro amigo, el peón de torre, también cobra protagonismo en este final.
Vamos a ver cómo el final de peón de torre y alfil contra rey será tablas siempre que se cumplan estos dos detalles:
- El alfil va por diagonales de diferente color a la casilla de promoción del peón.
- El rey del bando defensor puede instalarse en la casilla de promoción del peón.
Primero veamos cómo ese mismo final, aunque se cumplieran esos detalles, estaría totalmente ganado en caso de que el peón no fuera de la columna de torre.
Y ahora viene la excepción. Si movemos todo el escenario hacia la izquierda, convirtiendo ese peón en peón de torre, el final será de tablas.
Torre y peón contra torre
Uno de los finales más importantes del ajedrez, pues estadísticamente se produce con mayor frecuencia que cualquiera de los otros.
En este final, el bando defensor debe jugar activo para evitar quedar atrapado en la última fila y que el rey y peón enemigo se sitúen frente a él, por ejemplo tal y como vemos en el siguiente ejemplo.
Y ahora viene la excepción. Con el peón de torre no es necesario evitar esta posición. Todo lo contrario, la defensa pasiva resulta la más sencilla de las defensas con dicho peón. Vamos a verlo.
Si te interesan estos finales (deberían interesarte), te recomiendo que veas el siguiente vídeo de otra de las clases de los miércoles.
Torre contra peón
Por supuesto que una torre debe imponerse a un peón en la mayoría de los casos. Pero si el peón está avanzado y cuenta con el apoyo de su rey, la tarea no siempre es sencilla. A veces, de hecho, el bando fuerte debe conformarse con el empate.
Pero en este punto vamos a ver cómo el peón de torre, en lugar de ofrecer recursos tablíferos al bando débil, como hemos visto en los casos anteriores, se vuelve contra su dueño.
Primero veamos cómo el bando débil puede salvar el final en caso de que el peón no sea de torre y, por supuesto, esté avanzado y cuente con el apoyo de su rey.
Y ahora viene la excepción. Cuando el peón es de torre, al coronar, el caballo quedará en la esquina. Y ese final está perdido, como vamos a ver.
Espero que estos finales te hayan ayudado a comprender lo especial que es el peón de torre en los finales. Ten siempre un ojo puesto sobre él y recuerda estos recursos. Y si te ha gustado el artículo, te invito a que compartas en redes usando los botones que tienes más abajo. ¡Ah! Y cualquier duda, comentario o sugerencia será bien recibida