Maxime Vachier-Lagrave: El maestro de las torres atrapadas
A finales de octubre del año 2000 jugué un torneo de ajedrez tradicional: el Cap d'Agde. Fue un evento memorable para mí. En primer lugar, no todos los días se rodea uno de leyendas como Anatoli Kárpov.
Además, la forma en la que entramos al escenario fue inolvidable. Justo antes del comienzo de mi encuentro en la semifinal contra el GM Mijaíl Gurevich, el maestro de ceremonias anunció su nombre y la multitud empezó a corear "¡Misha, Misha!" Eso era de esperar, pues por algún motivo el GM Gurevich era el favorito de los locales y el público lo animaba así al comienzo de cada ronda.
Pero lo que me sorprendió realmente es que, cuando el MC anunció mi nombre, el público empezó a corear "¡Grisha, Grisha!". Claro que este cántico fue mucho menos entusiasta que el que animaba a mi oponente, pero le estoy agradecido al GM Joel Benjamin, quien creo que lo empezó. Por un momento sentí como si estuviéramos en un estadio durante un gran evento deportivo.
Además del torneo principal que jugamos, también había un gran torneo abierto y un match entre dos jóvenes prodigios: David Howell de Inglaterra y Maxime Vachier-Lagrave de Francia, ambos de 10 años. Si mal no recuerdo, Vachier-Lagrave ganó el match, pero las partidas no me impresionaron demasiado.
En mi artículo anterior mencioné el hecho de que las partidas de Caruana a las 11 años me recordaban a las partidas clásicas de Capablanca. Y aquí tienes lo que vi allí:
La horrible Ta3 es diametralmente opuesta al estético juego de Capablanca y, sin embargo, ¡Vachier-Lagrave logró ganar!
Maxime Vachier-Lagrave. | Foto: Maria Emelianova/Chess.com.
Olvidé esta partida rápidamente hasta que MVL se convirtió en un súper GM. Sus partidas están llenas de conceptos realmente reseñables y poco ortodoxos. ¡Uno de ellos es atrapar sus propias torres!
Mira el siguiente diagrama. El GM Igor Nataf sacrificó todo lo que pudo y ahora está a punto de dar jaque mate al rey negro sepultado. Pero las negras tienen una defensa. ¿Puedes encontrarla?
En la partida, MVL se conformó con las tablas (¿quizá estaba en apuros de tiempo?), pero su maniobra defensiva fue bastante reseñable, si bien totalmente forzada.
Ahora quiero mostrarte una de las partidas más inusuales que he visto en mi vida. ¡El análisis de esta partida se merece un libro por separado! Observa cómo MVL soluciona el problema de su rey sepultado:
Sí, la Th7 estuvo ahí atrapada durante casi toda la partida, ¡pero es precisamente esta torre la que decidió la partida! Por favor, no cometas el error de pensar que la Th7 atrapada es una criatura misteriosa que salva una mala posición milagrosamente. ¡La Th7 atrapada es tan mala como parece!
¡Lo único que pasa es que MVL gana siempre que esta Th7 atrapada aparece en sus partidas, independientemente de si es su torre o la de su oponente!
Parece que los rivales de Maxime son muy conscientes de este fenómeno: si tu torre queda atrapada contra el francés, estás condenado.
Sin embargo, si la torre atrapada es la de MVL, ¡más vale que no te metas con ella!
¡Como puedes ver, Vishy Anand pensó acertadamente que era demasiado peligroso atrapar la torre de MVL!
Muchos grandes ajedrecistas son asociados con piezas de ajedrez concretas. Philidor siempre será recordado por su inclinación hacia los peones. Tal era famoso por su juego de dama (había incluso un chiste que decía que una dama normal vale nueve peones y que la dama de Tal vale doce peones).
¡Para mí, Maxime Vachier-Lagrave es el maestro de las torres atrapadas!