Uno de los primeros conceptos que aprendemos en ajedrez es el de la importancia de las columnas abiertas para nuestras torres. Una vez que concluimos el desarrollo de piezas, nos hemos enrocado y conectado las torres llega el comienzo del medio juego. Y ese suele ser el momento para poner nuestras torres en acción. En este artículo te voy a contar muchas cosas sobre las torres, las columnas, la séptima fila y otras cuestiones estratégicas que te van a interesar
Lo básico
Como seguramente sabes (y si no es así ahora es un buen momento para aprenderlo) existen tres tipos de columnas:
- Abiertas. Aquellas en que no hay peones de ningún bando).
- Semiabiertas. Aquellas en que uno de los bandos no tiene peones, mientras el rival sí tiene.
- Cerradas. Ambos bandos tienen peones.
Las primeras y segundas son las que las torres utilizan para buscar su actividad. Pero te cuento a continuación qué podemos esperar de estas columnas y de qué manera nuestras torres pueden llegar a crear problemas al rival.
El objetivo de las torres
Muchas veces se aprenden las cosas de memoria, sin realmente entender el verdadero sentido de una idea. Me he topado con muchos jugadores que saben perfectamente que las columnas abiertas son buenas para los torres y que deben llevar sus torres a ellas, pero no acaban de entender el motivo. ¡Sí claro! Porque no tenemos un peón propio delante que nos moleste... eso es obvio. Pero el verdadero objetivo por el que una columna abierta puede llegar a ser tan importante es porque puede convertirse en el camino a través del cual entrar en la posición enemiga.
Hay un ejemplo que me encanta y suelo mostrar sobre este tema, de una partida Shirov - Anand que os comento a continuación.
La codiciada séptima fila
Ya lo hemos visto y comentado en la partida Shirov - Anand: el objetivo de las torres en las columnas abiertas consiste en entrar en la posición enemiga. La séptima fila es el corazón de la posición enemiga. La base de las cadenas de peones suele estar en la séptima fila (segunda fila, lógicamente, si hablamos de la posición del blanco).
Las amenazas que una torre puede llegar a crear en la séptima fila no solo afectan a esos peones, sino que en ocasiones puede cuestionar la seguridad del rey enemigo. Por supuesto debemos saber que si no podemos entrar en la séptima fila, la octava también puede ser especialmente efectiva
En el ejemplo que te muestro a continuación veremos al genial
Reti (justo en un artículo anterior te hablaba sobre su
famosa maniobra en los finales) siendo castigado por
Samish, quien sin piedad consigue la séptima fila y la utiliza con maestría.
Un sacrificio de peón a cambio de una columna
El sacrificio posicional es un elemento muy importante en ajedrez. De hecho ya te hablé sobre uno de los más típicos, el de calidad, en un artículo anterior titulado
Táctica y estrategia del sacrificio de calidad. El sacrificio posicional de peón es otro de los más característicos. Consiste en ofrecer un peón a cambio de alguna ventaja estratégica, y en algunos casos, ésta podría ser una columna.
El la primera partida de este artículo Shirov sacrificaba un peón por iniciativa y acabó obteniendo una columna. Ahora te muestro un ejemplo en que, directamente, el objetivo claro a cambio del peón consiste en adueñarse de una columna abierta.
El más difícil todavía: un sacrificio de pieza a cambio de una columna
Aunque suene extraño, la partida en la que le gané por primera vez a un gran maestro creo que me hizo más daño que beneficio. Ya he dicho que iba a sonar extraño
Te muestro a continuación la partida, que fue muy interesante y que me proporcionó una bonita victoria. El problema es que tras esta partida intenté compulsivamente realizar el mismo sacrificio en muchas partidas posteriores que acabé perdiendo.
Al final aprendí la lección. Y es que no se puede pretender ganar siempre de la misma manera.
Pero la idea de abrir la columna h mediante un sacrificio de pieza, permitiendo que ésta sea capturada en g5, es una idea temática que hay que conocer.
Un método sutil para ganar una columna abierta
Recuerdo cómo me impactó la partida de Karpov que ahora te voy a mostrar. Permite entender un plan eficaz para apoderarse de una columna abierta, evitando que el rival la use para provocar simplificaciones. La clave consiste en cortar la columna con una pieza menor (caballo o alfil), preferiblemente situándolo en séptima, de manera que el rival no pueda doblar torres y nosotros sí. Pero por mucho que te lo explique con palabras te va a quedar mucho más claro con esta partida.
Éste es el nombre con el que suelo explicar un importante tema estratégico, olvidado en los libros de estrategia. Y es que aprendemos que las columnas abiertas son fundamentales para penetrar en la posición enemiga, pero nadie nos dice que a veces no resulta tan útil preocuparnos por ellas. Por supuesto se trata de una excepción. Pero es importante que seamos conscientes de que aunque controlemos una columna abierta,
si las casillas de entrada en la posición enemiga están bien defendidas... ¿para qué nos sirve? ¿Le hacemos una foto cuando tengamos las piezas mayores dobladas o incluso triplicadas?
Observa el siguiente ejemplo. Las negras ganan la columna b y la usan con sus torres. Pero no hay nada importante en esa columna... y el blanco decide la lucha en otro sector.
Espero que a partir de ahora tu juego a través de las columnas abiertas sea muy efectivo. Si este artículo te ayuda a ello...
¡objetivo cumplido! Como siempre,
espero tus comentarios, observaciones y sugerencias